Hace unas pocas semanas decidí que ya había llegado la hora de prescindir de mis viejos pedales y a su vez del vetusto Playseat que los sujetaba. Me puse en contacto con Jon de NorthWSim para solicitar unos HE Pro y a los 3 días los recibía en casa junto con un nuevo cockpit, del que próximamente hablaré, donde disfrutarlos.
Como veis, directo y al grano. ¿Por qué estos pedales? Pues veamos; en las alternativas que hay en el mercado y para mejorar mis viejos pedales Logitech G25 tuneados con sensores hall (AKA hall effect) y muelles personalizados hay demasiadas pocas opciones. Pedales serios y con disponibilidad en Europa hay realmente dos: Fanatec y Heusinkveld Engineering, y como adivináis, ni siquiera juegan en la misma liga.
Por razones que no vienen al caso sólo Heusinkveld era una opción para mi. Así que con el salto presupuestario en mente me decidí por la variante barata. A pesar de que conozco personalmente a los chicos de HE, también conozco a la gente de northwsim e hice el pedido a través de su tienda.
Los pedales llegan en una caja no muy grande ya que los pedí sin placa ni brackets, y gracias a que vienen separados se pueden acomodar en poco espacio, lo que hace que no sean un paquete especialmente engorroso ni pesado. Cada uno de ellos esta compuesto de varias piezas de aluminio, lo que les da un aspecto de robustez y de solidez como pocos elementos existentes en el mercado actual de este tipo de componentes. El modelo Pro sobre el que escribo tiene una electrónica bastante sencilla pero no por ellos menos funcional. Se trata de un juego de muelles y elastómeros terminado en una célula de carga en cada uno de los pedales que mandan la señal a una placa Leo Bodnar de uso bastante común en el mundillo. Es algo replicable incluso a nivel casero, pero hay cierta ingeniera detrás de los HE que los distingue de los acabados que podamos hacer en casa.
Los pedales vienen pensados para poder ajustarse en múltiples maneras
- Altura: se pueden mover las placas para bajar o subir la zona de contacto.
- Resistencia: se puede ajustar la dureza del muelle con dos simples tuercas.
- Inclinación: ajustable unos 20 grados en el modelo Pro.
- Recorrido: es posible acortar el recorrido del pedal a nuestro antojo, también de forma bastante rápida.
- Dureza del freno: los elastómeros son combinables de diferentes maneras para conseguir una dureza personalizable del freno.
Muchas opciones significan mucho trabajo físico para configurar tornillos y posición, amen de otro tiempo en probar que todo funciona como esperamos y que el ajuste que hemos realizado esta acorde con nuestras expectativas. Por lo tanto voy a emitir una opinión completamente subjetiva sobre lo que viene por defecto y como son los pedales atornillados según salen de la caja.
El acelerador tiene un recorrido bastante extenso siendo completamente lineal y con una resistencia que permite adecuar perfectamente la intensidad para modular la aceleración en cualquier fase de la curva. Es muy preciso, no al nivel de los Ultimate claro esta, pero a años luz de otros pedales comerciales que he probado o configurado.
El embrague tiene una parte oscilante detrás que hace el pequeño truco de darle otro tacto a partir de cierto punto, intentando simular lo que seria un embrague real. No llega al tacto del modelo Ultimate pero es un acercamiento bastante bueno, y puesto que es un pedal que apenas uso por el momento, diré que si, que mola bastante.
El freno es evidentemente lo más trabajado y lo más decisivo en cualquier juego de pedales, es lo que te ayuda a mejorar y a modular el paso por curva, así que parece normal esperar mejores cosas que en el resto. En este caso viene con un recorrido muy corto, como en un kart o coche de competición, con un muelle de una altura mínima para a continuación seguir con un juego de tres elastómeros separados por arandelas de metal. La resistencia es de aproximadamente unos 55 kg según las especificaciones del fabricante, así que para aprovechar el freno en su porcentajes más altos es necesario apretar bien fuerte. Si no nos convence, se incluye una pequeña bolsa con separadores y elastómeros adicionales para intentar conquistar los gustos más exigentes.
A este tipo de hardware, como el resto, hay que adaptarse, sobre todo cuando no estamos acostumbrados a un recorrido tan corto en el freno. La memoria muscular ha de cambiar y aprender a frenar no solo por recorrido si no por presión y fuerza. Por lo que se es más natural la memoria muscular en esos supuestos que en desplazamiento, y la verdad es que no me ha costado demasiado adaptarme. Veremos cuando pase a vehículos con más velocidad.
Los pedales se configuran a través de DIView para todos los simuladores excepto para iRacing. Con Diview se puede precisar mucho el rango que queremos usar del recorrido del pedal, sin embargo calibrar en iRacing el tope del pedal y la mínima zona muerta necesaria al comienzo y final se hace un poco coñazo. Punto negativo para la gente de iRacing ahí aunque nada grave que no se solvente en unos minutos, los Ultimate soportan mejor este tema de calibración al ser la electrónica más precisa.
Con apenas 20 días de uso puedo decir que no emiten ningún tipo de ruido, al menos por el momento. En caso de algún ligero desajuste es aconsejable lubricar con unas gotas de aceite de oliva para volver al silencio. Como ya os digo no he tenido ese problema. En el resto, el mantenimiento es 0, ya que están construidos a prueba de bombas, pesos y estaturas. Si por algún casual alguna catástrofe sucediera, el servicio al cliente de HE es superlativo, y tendréis la solución en menos de 4 horas o un paquete en vuestra casa en menos de 4 días. Creo que ni Amazon es capaz de superar eso.
Más cosas buenas, conservan su valor en la venta de segunda mano casi por completo y además no pierden la garantía con el fabricante, que nunca está mal tenerlo en cuenta ya que la vida da muchas vueltas.
En las próximas semanas comenzare a hacer algunas personalizaciones y pruebas con un mod del que todo el mundo habla muy bien: el muelle de freno de northwsim. De momento no puedo estar más satisfecho con los pedales, y a pesar de que visualmente a algunos os puedan echar para atrás, no hay color entre estos y el resto. Además la reducida oferta en Europa y el encarecimiento de los productos foráneos hace casi imposible o desaconsejable pensar siquiera en otras posibles alternativas.