Parece un poco tarde a estas alturas, pero nunca esta de más tener una review de aquello sobre lo que hablamos una y otra vez. Al fin y al cabo no es un titulo al uso, pero mucha gente esta acostumbrada a que aún se realicen entregas únicas, con sus correspondientes ciclos de vida y a leer las reviews en prensa como si de otro FIFA anual se tratara. Luis H. escribe este interesante y extenso análisis de iRacing para invisiblem.net que me permito el lujo de «salvar» en pos de futuras desapariciones.
Es día de carrera, todo ha ido más o menos bien en las prácticas para conocer el circuito y la variante que toca esta semana, aunque la maldita curva 6 se resiste y no consigues bajar el crono. La clasificación ha terminado y has conseguido la sexta posición, que no es óptima, pero te va a librar de la mayor parte de incidentes de la primera vuelta. Tu coche está en parrilla a falta de que se encienda el semáforo y das unos toques de gas comprobando por última vez los litros de gasolina y la temperatura de la pista. Con 28 grados la degradación de las gomas te tendría que respetar hasta al menos, las 15 primeras vueltas, pero Monza es todo velocidad y frenadas al límite. 10 segundos y pones tu motor en régimen de marcha. Agarras el volante, engranas primera, ultima mirada al retrovisor…. Suerte para todos, pie a tabla y gaaaaaaaas…
Esto es lo que te hace sentir iRacing en cualquiera de sus múltiples salidas. Eso no te parecerá notable, porque si te gustan los juegos de conducción lo habrás vivido en las parrillas de Gran Turismo, Project Cars, Drive Club, Asseto Corsa, incluso en los Need for Speed… Pero no es lo mismo, y ahora te cuento el motivo.
iRacing es un simulador de carreras multijugador online para PC, Mac y Linux que se basa en un cliente web que conecta tu perfil de piloto con las diferentes pruebas en las que vas compitiendo. Esta es la diferencia clave con otros juegos de conducción, tu reputación importa y se ve inmediatamente afectada por tu comportamiento en pista, tu maestría y tu eficacia como piloto de competición.
Los puntos de tu licencia y tus dos indicadores: iRating, que mide tu pericia y competitividad, y tu Security Rating, que refleja como de seguro conduces, incluyendo toques con otros coches, con las barreras, pérdidas de control, salidas de pista y demás incidentes, harán que tu clasificación global mundial y tu reputación quede reflejada en tu perfil. Y esto es importante, porque dependiendo de tus indicadores competirás con pilotos de tu mismo estilo y nivel.
Así que si eres un buen piloto, prudente, que no genera incidentes te encontrarás para una misma carrera en la manga o split “bueno” mientras que si eres un kamikaze, que marrullea y se dedica a realizar “curvas en apoyo” con los otros coches estarás en la manga de los chicos malos, y siempre hay uno peor que tu. Te lo aseguro.
Y esto es algo completamente nuevo y diferente, porque si sois de simuladores de conducción todos habréis experimentado que en la parte online apenas puedes acercarte a un rival sin que empiece a hacer zigzag para que no le pases, o bien directamente se estampa contigo para echarte de la pista si intentas adelantar. O te encuentras un coche en dirección contraria haciendo de “rompehielos” con los que simplemente quieren competir y disfrutar de la sensación de la conducción deportiva. Aqui hay un código de conducta que se hace respetar, o nadie correrá contigo.
iRacing es un simulador simulador, nada de arcades, ni de compensaciones, ni los rivales que ralentizan para que los alcances. Los coches se dañan de verdad, incluso a veces en demasía, y un simple rozón te descompensa la dirección para toda la carrera, teniendo que meter el coche en boxes para reparar, o bien abandonar. Y esto también se refleja en tus ratings, así que cuidadito donde te metes.
Técnicamente el simulador es muy correcto, necesitando una configuración mínima de hardware bastante asequible en cualquiera de las tres plataformas. Eso si, cuanto más tengas, mejor y por supuesto la tasa de FPS se incrementará dejándote sentir más y mejor tu coche. Yo lo estoy moviendo en un iMac del 2011 con 512 Mbs de tarjeta de vídeo y los 60 FPS solo bajan hasta 40 en las salidas de más de 32 coches. No está nada mal, teniendo en cuenta que tampoco tienes un popping realmente notable de los objetos a los que te aproximas. Quizás algo de saturación de color, no es foto realista, pero te lo pasas tan bien, que se lo perdonas.
Adicionalmente está el método de control, entre los que no está incluido (que yo sepa) el teclado. Así que para ponerte a los mandos de tu máquina necesitaras al menos un gamepad, joystick, o evidentemente muy recomendable, un volante con pedales. Aunque sea uno de los normalitos. Por ahora no vas a necesitar virguerías. Eso si, si tiene force feedback, mejor que mejor. Tras las calibraciones correspondientes de radio de giro, manetas y sensibilidad de los pedales, te encuentras en boxes, a los mandos de tu coche, con las manos en el volante, y tu compañero de pit levantando la “piruleta” para que salgas.
Los circuitos están cartografiados con tecnología láser, de tal manera que la reproducción de los mismos es sorprendente, baches incluidos. SI no me crees busca en google “iracing vs real” y elige uno de los vídeos. Esta tampoco es algo raro, porque este método de representación ya lo usan otros simuladores, pero te enseña que esto va en serio, que vas a obtener un escenario para mostrar tus habilidades como si hubieses contratado una tanda en el circuito. De hecho tanto es así que aunque al principio el set up del coche es uno preestablecido, luego podrás modificar todas y cada una de las partes del coche para que se adapte al circuito, condiciones de pista, temperatura, peso…
Como banda sonora no tienes más que el rugido del motor, y los cánticos de tus ruedas chirriando al paso por curva, nada de música ni distracciones. Solo tu spotter, tu control de carrera que te va informando de tu posición, tiempo por vuelta, incidentes en pista, fuel que te queda, entradas a boxes, coches parados, y sobre todo, de si tienes un coche en tu paralelo para indicarte que mantengas la línea y no colisiones con él, avisándote de cuando puedes volver a tu línea de carrera al adelantar o ser adelantado. Y está muy conseguida esa sensación de alerta cuando te ves bregando por una posición. También puedes cambiar por uno que te hable en cristiano, o bien que sea un compañero el que te haga de spotter, pero eso lo veremos luego. Adicionalmente se incorpora un chat de voz muy competente con el que podrás compartir y llamar de todo, a ese que entró en pista sin mirar…
El caso es que te pones en una práctica libre, tu solo, en un circuito sin la presión de ver tus ratings afectados, a ver qué tal se nos da… y acostumbrado a otros juegos iRacing no te perdona. Te pegas una derrapada que te lleva contra el muro, con dos penalizaciones por salirte de pista, por pérdida de control, y si has tocado el muro, una adicional por contacto. Vuelves a boxes, coche reparado, y de nuevo a pista, la primera la pasas bien, recta larga, te cebas con el pedal y de repente la chicane del fondo se te hace pequeña pequeña. Para, para, paaaaaraaaaaaaaaaa… te marcas un “totieso” de libro que en el mejor de los casos te lleva a la hierba y tu con cara de rana en un centro comercial… Venga, a pista y gas, te haces una larga de derechas y ya avisado te empiezas a tomar en serio lo de las referencias, freno, reduces y el coche te culea como una Celia Cruz en medio de un concierto por haber bajado una marcha de mas o no haber tenido cuidado al dar gas al salir, pegando un pisotón.
iRacing es simulador, y lo he repetido ya varias veces. El realismo no está solo en las pistas, sino también en el comportamiento de los coches. Tienen una física terriblemente cruel y las ruedas salen frías, pero frías que son casi de madera. La reducción de marcha si no es la adecuada, inyecta potencia a las ruedas como si no hubiera un mañana, los límites de la pista se hacen respetar haciendo que pierdas tracción, la línea y la dignidad, las referencias son para usarlas, no una mera recomendación. Si te tragas una, te tragas la curva. Hay que aprender, y mucho.
Yo no me considero un pilotazo, pero tampoco soy manco y me he pegado con todos los juegos de conducción que me he echado a la boca con bastante éxito. He hecho cursos de conducción en la vida real y he entrado en circuito siempre que he podido. Sin embargo en iRacing me he encontrado con una sensación bastante de WTF en cada salida de pista. El Force Feedback del volante te habla y junto con el sonido te da información sobre lo que el coche está haciendo en todo momento, y lo tienes que aprender, no diré de cero, pero si desde muy abajo. Aquí no vale lo de “le doy dos vueltas a ver como es el circuito” y me meto en carrera.
Aquí toca entrenar, entrenar y entrenar. Tandas de 20, 40 o 50 vueltas tu solo para ir bajando tiempos y mantenerte en lo negro. Si algo te tiene que definir no es tu rapidez, si no tu constancia y tu solvencia, porque el error está ahí, acechándote. Y para ello también tienes de tu parte el estupendo sistema de repeticiones (una vez que le coges el truco) con múltiples vistas de cada uno de los segundos de tu sesión, para que veas que pasó en ese cambio de rasante o por qué se te fue de delante si no ibas rápido.
A esto también contribuye su modelo de negocio, porque iRacing no es gratis, aunque te puedas acoger a alguna oferta promocional para probarlo. iRacing necesita una suscripción que tienes que renovar cada mes, tres meses, seis o años, dependiendo de la fórmula que elijas. Para que te hagas una idea yo he empezado con una licencia de tres meses por 15 dólares, que no es caro, pero si te pone un aviso sobre cuál es su esquema de uso. Porque ahora viene lo siguiente.
Con el paquete básico se incluyen 13 coches y 14 pistas, que incluyen las dos modalidades de competición que actualmente contiene: Track y Oval, al más puro estilo Nascar o Indy, con sus coches correspondientes para cada una de las pruebas, que están organizadas en campeonatos divisionales. Con esto tienes más que de sobra para obtener la licencia C… pero para subir hasta la A (que es Fórmula 1) tendrás que ir adquiriendo tanto coches como circuitos. Cada coche adicional son 11 dólares, y cada circuito casi 16 dólares. Tienes ofertas promocionales por temporada, descuentos por volumen, pero al final, si no tienes cuidado te dejas 400 dólares para tener todos y cada uno de los circuitos y coches que contiene el juego. Y eso es importante, porque pasa de ser una diversión, a casi un hobby, pero aún no he acabado.
Con el ir probando, compitiendo, ascendiendo de categoría, ir mejorando y ascendiendo, resultará que tu volante ya no es suficiente, querrás uno mejor, con mejor feedback, mas robusto, mas profesional. Además querrás cambiar el apaño que tienes para que no se te muevan los pedales y ponerte un play seat, y luego los accesorios del volante, o de la cabina y meter body shackers para que te mueva el cuerpo al ritmo de las trazadas. O meter tres pantallas para tener visión periférica mejor…
Y no es algo raro ni descabellado, te aseguro que te lo vas a plantear en cuanto le vayas pillando el tranquillo. Con lo que te puedes encontrar con una instalación Zalem de tres pantallas, con volante y pedales Fanatec con controles neumáticos servo pilotados y una corona BMW Racing Team igual a la de los pilotos del DTM, un display separado para el cuenta revoluciones y un baquet Sparco en medio de tu salón. Y tu señora yéndose a vivir de vuelta con tu suegra, tus amigos preguntándose que fue de ti, mientras tu te haces campeón de la Fórmula GT3. No me ha pasado todavía… pero tengo pensamientos impuros.
Porque además la comunidad del simulador es fantástica tanto a nivel local como internacional (a poco que seas piloto, y no un zascandil) con ayudas, consejos, setup’s de los coches para cada circuito, escuelas de conducción, video tutoriales para cada prueba y circuito, sesiones privadas para aprender… Salvo excepciones contadas, sobre todo al principio en la categoría Rookie, y salvando la deportiva y sana competitividad, la gente es estupenda y el que está está por que le gusta este mundo y sus particulares normas de conducta.
Los campeonatos pueden ser disputados a solas, o bien englobado en las filas de un equipo. siempre online con un calendario de pruebas que se repiten a lo largo de una semana en múltiples mangas, sin boots, y aprovechando las capacidades de repetición y retransmisión, las carreras son emitidas y comentadas por presentadores profesionales como si estuvieras viendo una carrera en la ESPN o EuroSport. Echadle un vistazo en YouTube y suscribiros al canal oficial de iRacing. Resulta curioso lo emocionante y entretenidas que son las carreras (siempre del mejor split de pilotos con las mejores puntuaciones) pero no solo las de F1, si no la misma Fórmula Renault, a la que puedes acceder con licencia D, o las GT Series, la BlancPain, la misma Rockies Cup con el Mazda MX 5… Y tenemos grandes pilotos nacionales, bregando por las primeras posiciones. Toda una plataforma de eSports temática que se está construyendo.
En resumen, si os gustan los simuladores de coches, queréis probar algo más serio, con menos “niños rata” por metro cuadrado, y poneros a prueba, dadle una oportunidad, no os frustréis al principio y entrenad duro, porque hay mucho que experimentar, sufrir y disfrutar, en el mundo de los simuladores.
Nos vemos en la pista!!!!
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