Esta es una pequeña crónica desde nuestra perspectiva como invitados al evento. Ni trata de ser completa ni exhaustiva, solo nuestra visión como visitantes.
La Madrid Games Week crece cada año en extensión y en relevancia, y los dos pabellones que dedicó IFEMA a la feria comienzan a quedarse cortos, sobre todo por la masiva afluencia de publico que hace que en determinados momentos sea complicado hasta moverse entre las kilométricas colas que rodean cualquier stand. La gente quiere probar, jugar y testar, aunque a veces sean cosas que tienen en casa, simplemente por el sabor de hacerlo en otro entorno, con otros equipos o delante de sus amigos.
En cuanto a la organización de Sony, ya iban adelantando que el evento iba a ser un plato fuerte a todos los niveles, y desde el jueves los primeros visitantes comprobaban asombrados la extensión y el tremendo nivel de preparación que conllevaba todo el evento propio de GT Sport. Anunciado por televisión y prensa como un gran acontecimiento internacional, no quedaba más remedio que convertir aquello en un enorme plato de televisión, con un caos organizado en el que todo se movía al compás que marcaba la programación y los horarios.
La organización fue impecable e impensable para un evento de estas características hace tan solo unos años. El simRacing saltaba a las televisiones del viejo continente en un horario prime time de fin de semana en las principales cadenas de cable y conseguía atraer enormes colas en el pabellón de PlayStation incluso una vez ya comenzado. La apuesta de Sony por hacerlo en España funciono muy bien gracias a que Coque, piloto de Williams, salvó la presencia local en la final, lo que permitió exprimir un poco al publico en la realización televisiva.
Entre los amigos que nos reunimos allí, pudimos encontrarnos a algunos de los habituales del simRacing, como Marcelo Arconada (DigiProst), Javier Guerra (Williams), Tiago Rosa (Williams), Oscar Ruiz (Vodafone Giants), Álvaro Blanco, Roldán Rodríguez y seguro que muchos otras personas a las que me dejo por el camino.
Después de las semifinales del viernes y de que Manuel y Alex se quedaran fuera, el peso del sábado recayó sobre Coque, aunque ya clasificado para la final mundial pudo relajarse, si es que eso es posible en este entorno, y disfrutar junto con los otros 9 finalistas. La competición final estuvo dominada por el alemán Hizal, que no tuvo problemas en doblegar a los demás, en parte por la fortuna del sorteo y en parte gracias a su gran conducción. Unicamente el español pudo ponerle en aprietos y disputarle la victoria en la carrera celebrada en Montmeló, cuyo estreno en la serie Gran Turismo resultó tremendamente exitoso.
La presencia del control de carrera con jueces y comisarios experimentados además del personal de Polyphony Digital permitió que las finales se disputaran con una gran conducción viendo bastante limpieza en pista y estando tremendamente igualadas. Al final tanto Sony, como Kazunori Yamauchi y su equipo se mostraron satisfechos con el devenir de la cita y es de esperar que en algún momento futuro se vuelva a apostar por nuestro país como una de las más importantes sedes europeas del simRacing.
Esperaremos impacientes ese momento. No quisiera despedirme sin dar las gracias a todos los que hicieron posible este evento ni a los que nos permitieron estar allí y disfrutar de los entresijos de la competición; Quique, Nacho, Chema, Liliana, Lucas, Eric y un largo etc.