Gran Turismo 7 Spec III ya está en marcha y, además de coches y circuitos, trae un cambio que se ve y se siente en cada stint: los vehículos ahora se ensucian más y más rápido durante la conducción. No aparece señalado en las notas oficiales, pero se nota tras la actualización 1.65. El resultado es un plus de inmersión que brilla, sobre todo, en carreras largas y en superficies con polvo o grava.

Coche limpio, carrera pobre.
Estas son las claves del nuevo comportamiento tras Gran Turismo 7 Spec III:
- La acumulación de suciedad aparece antes y en mayor cantidad que antes, especialmente si ruedas en pelotón o fuera de la trazada.
- No solo afecta a tu coche: los rivales también muestran carrocerías y parabrisas visiblemente más castigados tras varias vueltas intensas.
- La intensidad crece con la duración del stint: es más evidente en eventos de 6, 8 o 24 horas, y en tramos de tierra como ranchos y circuitos con mucha escapatoria.
- La suciedad no es persistente en el garaje: al abandonar la pista el coche vuelve a verse impoluto, de modo que el lavado queda para el efecto más que para una necesidad.
En la práctica, este efecto realza el contraste visual a medida que pasa el tiempo de carrera, añade narrativa a las fotos de Scapes y Photo Mode, y acompaña bien al desgaste de neumáticos y combustible en pruebas de resistencia.
Cómo probarlo
Si quieres “manchar” de verdad, prueba un stint largo con tráfico o una sesión off‑road; si prefieres comprobarlo rápido, bastan unas mangas cortas en asfalto con mucha goma y polvo en el aire.
Organiza tandas largas con coches claros (los colores lisos evidencian mejor la suciedad), activa condiciones con viento o coches en rebufo y guarda repeticiones para comparar. El efecto no altera la estética del coche en tu garaje, pero en pista otorga ese look de “fin de carrera” que tanto pedía la comunidad.