En los últimos años, con el avance tan abismal que ha estado teniendo la tecnología accesible para todos, todos podemos tener en casa un simulador de carrera de alta fidelidad, con periféricos que cada vez nos entregan más sensaciones, con mejores resoluciones en las pantallas, e incluso hasta con gafas de realidad virtual. Todo esto ha logrado que la brecha entre lo real y lo virtual cada vez sea más y más fina, solo veamos la diferencia que hay entre el primer Gran Turismo en la PlayStation 1 y el próximo Gran Turismo en la PS5. La evolución conseguida en estos 20 y tantos años es una locura si comparamos con el avance tecnológico que tuvimos en todo el siglo XX.
Gracias a esta expansión masiva de los simuladores caseros, se han creado diferentes programas para que las personas que tienen el talento para las carreras puedan sacarlo a relucir y grandes equipos o incluso compañías puedan darles una oportunidad para llevar ese talento en las pistas virtuales a las reales, tales como los programas GT Academy o McLaren Shadow.
En el caso de la GT Academy tenemos el caso del español Lucas Ordoñez, quien luego de ganar la edición inaugural del programa, se ganó un puesto en la GT4 European Cup de 2009, donde logró un podio en su primera carrera, y más adelante competiría con un LMP2 en las 24 Horas de Le Mans de 2011 donde acabaría en un meritorio segundo puesto de su categoría, todo esto con muy poca experiencia previa en carreras reales. También tenemos el caso del mexicano Ricardo Sánchez, que sin tener mucha experiencia en la vida real fuera de los Karting, pudo demostrar su talento en Gran Turismo, siendo uno de los de la GT Academy de 2014, lo que le permitió competir con el equipo Nissan Nismo en la vida real en diferentes carreras de resistencia así como en el campeonato completo de la Blancpain de 2015.
Otro caso reciente es el de James Baldwin, finalista de un nuevo programada llamado «World’s Fastest Gamer» donde buscan a los mejores simracers del mundo. En este caso, James estuvo entre los primeros del programa, ganando una oportunidad de probar diferentes autos en la vida real. Una vez completadas dichas pruebas, el equipo McLaren le ofreció un auto para poder correr en la GT World Challenge Europe con el McLaren 720S GT3 con el equipo Jenson Team Rocket RJN, equipo codirigido por el campeón mundial Jenson Button.
Junto a estos casos, hay decenas de otros casos más de simracers que han logrado saltar la brecha entre lo virtual y lo real gracias a su talento y dedicación, sin embargo, el SimRacing no solo cumple con el orden Virtual>Real. Hoy en día, hay muchos pilotos que comenzaron en la vida real que han optado por ir a lo virtual en sus ratos libres para poder seguir practicando, como el caso de Lando Norris, Max Verstappen, Fernando Alonso, Nicki Thiim, Agustín Canapino y más. Incluso ellos mismos han dicho que les ayuda a mantenerse activos en esos días o semanas que no compiten en pista contra otros pilotos, algo que sin lugar a dudas solo puede sumar en lugar de restar.
Obviamente, hay sensaciones que los simuladores caseros no pueden simular como es el caso de las fuerzas G, el impacto real de los choques, la adrenalina de ir a más de 300km/h, etc. Pero, sin lugar a dudas, los simuladores cada vez forman parte más esencial en la vida de todos los pilotos, tanto reales como simracers, y esto trae como consecuencia que las nuevas generaciones de pilotos que vayan llegando a las carreras se formen mucho más en los simuladores que en las carreras.
¿Podrán llegar a ser lo suficientemente competitivos como para disputar las competiciones más importantes? Solo el tiempo lo dirá, pero lo que si podemos asegurar, es que el SimRacing llegó para quedarse en el mundo del Motorsport.