La gestión de las emociones puede ser uno de los aspectos más difíciles en el mundo del motor tanto real como virtual. El estado mental es una parte tan crítica para la concentración adecuada, que permite alcanzar el máximo rendimiento en casi cualquier actividad, tomando un papel fundamental en los esports.
Todos nos hemos hecho siempre la misma pregunta, ¿por qué me pongo nervioso en la salida si esto es solo un juego? ¿Cómo es posible que haya entrenado clasificación durante una semana y a la hora de la verdad esté nervioso? ¿Por qué me ponen nerviosos los rivales?
Todas estas preguntas, son síntomas puros de la competición, es algo que llevamos escrito en nuestro ADN. Por lo tanto, es uno de los factores a controlar en nuestra etapa como pilotos.
Tomemos como ejemplo, la presión previa a la carrera. Por lo general, un piloto puede estar muy ansioso o nervioso, lo que lleva a la distracción de la tarea real en cuestión. Aprender a controlar nuestras emociones tiene que ser una actividad más a la hora de entrenar nuestras habilidades mentales y físicas.
Visualizar y planificar cómo te gustaría que se desarrollara la salida ideal, o la vuelta ideal con detalles como los puntos de frenado, la colocación del coche, la marcha, etc., puede ayudar a canalizar esa energía nerviosa (negativa) en una mentalidad productiva, preparándote para la carrera.
Otro ejemplo muy común, digamos que a mitad de la carrera, es esperar a un nuevo reinicio de carrera debido a una bandera amarilla. En lugar de ponerte nervioso porque el coche de detrás te adelante en la reanudación, o de preocuparte porque tus neumáticos estén destrozados y tengas que ir cojeando hasta el final, piensa en lo que puedes hacer para aprovechar al máximo tus puntos fuertes. Visualiza cómo quieres preparar la reanudación, para conseguir el mejor salto a la bandera verde, cómo vas a trazar la próxima curva, o cómo podrías alterar tu conducción para optimizar lo que te queda en esos neumáticos. Mantén una actitud positiva y aparta de tu mente todas las emociones o pensamientos negativos.
Visualizar en todo momento lo que quieres hacer te ayudará a dejar atrás esas opciones de probabilidad e incertidumbre. Aunque parezca mentira, esta técnica te ayudará a estar más tranquilo y a afrontar las situaciones de carrera más preparado.
¡Nos vemos en el asfalto!