Es bien sabido en la comunidad que iRacing está maldito en el tema de algunas licencias externas o cuando eligen introducir nuevo contenido. Lo normal, siguiendo su mala pata, es que cualquier categoría que apuntan en su libreta, desaparezca a los pocos meses o que no puedan adquirir los datos necesarios por falta de competición. Por pasarles, les sucede hasta en los escaneados de algunos circuitos, como Charlotte, donde se realizaron cambios en el trazado al poco de realizarse el reescaneado.
En marzo de este año iRacing se asociaba con la Skip Barber School para ofrecer premios a los ganadores de las temporadas siguientes. Unos pequeños cursos introductorios de 1 y 3 días en los que podrían ser unos momentos increíbles de aprendizaje y experiencia. La presencia española estaba casi asegurada ya que A. Coba es uno de los cabezas de la serie y como ha demostrado en esta temporada, su presencia era más que segura. Curiosamente, tras mas de 40 años en activo, la escuela ha solicitado la bancarrota y los acreedores están viendo como repartirse los 5 millones de euros en activos que aún poseen.
Por la parte de iRacing queda ver como se sustituyen estas compensaciones prometidas y que hacer en esta nueva situación, aunque naturalmente el asunto mayor es que una institución como la Skip Barber School haya caído de esa manera tras ser la escuela de Michael Andretti, Danica Patrick, Juan Pablo-Montoya, Bill Elliot, Jeff Gordon y Kyle Petty.
Con unas deudas de mas de 10 millones de dólares, es difícil que alguien tras la liquidación quiera reavivar el mito, aunque en esto del motor, y en la vida, nada es seguro.
El otro ejemplo mas o menos reciente del mal fario de la compañía americana viene del tan deseado y nunca presentado Formula Renault 3.5. El coche fue prometido cuando se adquirieron los derechos de la Formula Renault en sus dos variantes 2.0 y 3.5, pero nunca llego a hacerse realidad, dejando un vacío patente en la escalera hacia la F1.
La serie real ha sufrido mucho desde entonces, perdiendo el apoyo de la marca matriz y con cada vez menos presencia. El horizonte no se presentaba halagüeño y han anunciado que en 2018 no habrá competición al ser el numero de participantes insuficiente para resultar atractivo a espectadores y contendientes. Otro motor V8 que se va al limbo con la esperanza remota de retomarse después de buscar nuevos patrocinadores y dinero. Una categoría por la que pasaron nombres tan ilustres como Fernando Alonso, Sebastian Vettel o el recientemente fichado por Toro Rosso Pierre Gasly.