Hace unas horas que nuestro compañero José Blanco se ha ido. Para algunos será la primera noticia, otros supongo que ya conocían el hecho por otros medios. Sea como fuere y cada vez más a menudo en este mundo digitalizado, la enfermedad se hace también protagonista para reflejar que Internet esta presente en nuestra vida más de lo que nosotros pensábamos, incluso con aquellos apartados que nos gustaría dejar de lado.
Vivimos deprisa, demasiado, tanto que ni nos damos cuenta la cantidad de detalles y ocasiones que dejamos de disfrutar por miedo, desconocimiento o simple pasividad. El tiempo pasa rápido, los días y las semanas empiezan a volar, y aunque solo sea por un momento, paraos a reflexionar, salid y disfrutad del día, del sol de la mañana o de la lluvia en vuestras manos. Disfrutad de los que os rodean, hacedlos felices con esos pequeños gestos que no cuestan nada y que afectan también a vuestro propio bienestar.
Abrazad a los que queréis y hacedles sentir queridos y aprovechad todas las oportunidades de hacer, de equivocaros y de aprender pues nunca sabemos cuán preciados pueden ser esos momentos para no tener luego que echarlos de menos.
Un cariñoso abrazo para todos los que han compartido con él tantas vivencias y anécdotas, buenos y malos ratos. Descansa en paz.