Una de las claves para conseguir un máximo rendimiento en la conducción es la posición del piloto. Es uno de los primeros objetivos a tener en cuenta antes de salir a pista, el de elegir un buen asiento y configurarlo adecuadamente. Este artículo de Ken Koop de PCA nos muestra información valiosa que hasta ahora pasaba desapercibida para la mayoría de nosotros. Si te interesa leer el documento desde su fuente original puedes hacerlo haciendo clic en el siguiente enlace.
Posición Correcta de Conducción
Escrito originalmente por: Ken Koop
¿Alguna vez te has fijado en la posición de las personas cuando conducen? La mayoría de las personas no son conscientes de su postura en la conducción y esto puede suponer graves problemas a corto y largo plazo. Nos podemos encontrar a personas que conducen con los brazos completamente estirados, sin tener ningún tipo de inclinación en sus codos. Otras muchas están tan cerca del volante que si deslizáramos un CD entre el volante y su pecho resultaría casi imposible. Obviamente, ambas posiciones son incorrectas por varias razones.
Como siempre, lo primero y más importante es la seguridad. En ambas posiciones, el conductor no tiene el suficiente espacio ni flexibilidad requerida para realizar correcciones ni movimientos de conducción en caso de emergencia. Para un piloto de carreras profesional o personas con la suerte de tener su propio coche de carreras, su asiento y volante se establecen en una posición específica que nunca varía. Hacen esto debido a que cada vez que entran sus coches, la posición sea optima para ayudarles a realizar mejor su trabajo. Aunque parezca mentira, para ir rápido, no puedes hacerlo sin una configuración correcta de la posición de conducción.
Entonces, ¿existe realmente una posición ideal para todos los conductores? Bueno, realmente existe algo muy cerca a una posición perfecta que permite la comodidad (reducir la fatiga), flexibilidad y un buen control del vehículo en todo tipo de condiciones en el asfalto. No lo aprendí hasta que por primera vez asistí a mi primera escuela de pilotaje y conducción.
Bien, echemos un vistazo a cómo ajustar el asiento y el volante para conseguir una configuración adecuada para los diferentes tipos de conducción, tanto en calle como en pista. Comenzaremos con la posición del asiento, que es nuestro primer contacto con el coche.
Ajustaremos el asiento en la posición más baja que nos permita una buena vista de la carretera y un buen alcance en la visión. Esto no sólo ayuda a bajar el centro de gravedad del coche para mejorar las curvas y el rendimiento, sino, que también coloca el cuerpo del conductor de tal forma que nos ayuda a conseguir una mayor consciencia de los ejes de posición. Esto le da al conductor una mejor idea de lo que el coche está haciendo durante cualquier cambio en la velocidad o la dirección. Su trasero debe estar colocado firmemente en el respaldo del asiento, de modo que pueda sentir el chasis, a través del asiento, hasta su columna vertebral y finalmente llegar al cerebro (donde se puede determinar lo que el coche está haciendo). Tendrá una mejor idea de lo que la parte trasera del coche está haciendo si su cuerpo está firmemente anclado al asiento.
Colocaremos el asiento lo suficientemente hacia delante para que su rodilla aún tenga cierto angulo con el pedal del embrague totalmente presionado. Lo que no queremos es estirar la pierna mientras presionamos el embrague. Esto nos permitirá un movimiento adecuado mientras utilizamos los pedales del freno y embrague, una mayor soltura. El pie derecho debe estar cómodamente colocado de tal forma que nos permita presionar el acelerador sin levantar el talón del piso. El pie izquierdo, cuando no funciona el embrague, debe estar descansando en la «zona muerta» (que para eso está). Esto le proporcionará un refuerzo adicional durante las curvas o durante una maniobra de emergencia.
Ahora que tenemos los pies y las piernas posicionados correctamente, echemos un vistazo a la posición de los brazos. La distancia correcta desde el volante se puede ajustar fácilmente con algunas técnicas simples. La distancia adecuada se puede lograr con los hombros descansando contra la parte posterior del asiento, y luego estirar los brazos hacia el aro de modo que las muñecas están descansando en la parte superior del volante.
Las muñecas deben ser capaces de flexionarse sobre el volante. Si sus muñecas no son capaces de flexionarse sobre la parte superior del volante, entonces tendrá que ajustar el asiento (o ajustar el ángulo del respaldo del asiento) hacia delante o hacia atrás para lograr esta posición. Si su volante tiene ajuste para el alcance (hacia adelante y hacia atrás) y la altura (arriba y abajo), esto le dará alguna ayuda adicional en el ajuste fino de su posición óptima.
Probablemente notará que el ángulo de su respaldo (cuando se ajusta correctamente) será más vertical de lo que está acostumbrado. Estar demasiado cerca o demasiado lejos del volante impedirá su capacidad de maniobra en las curvas estrechas; Es decir, conducir en caminos de montaña, desviarse para evitar un animal que podría correr hacia la calle o conducir en una pista de carreras. Una posición inadecuada puede incluso requerir que usted mueva sus manos en el volante mientras esta en las curvas, que es no sólo una técnica terrible pero que resulta también ser peligrosa.
La posición de las manos en el volante debe estar en la posición de las 9 y las 3 en punto con los pulgares en contacto. Esto le dará un mayor control en la suspensión delantera bajo ciertas condiciones. Su mano derecha también estará en una mejor posición para alcanzar la palanca de cambios y permite un movimiento más natural al agarrar la palanca para el siguiente cambio de marcha. Ubicar las manos de esta manera permite una mayor entrada de dirección en las esquinas apretadas, sin que los antebrazos se crucen entre sí.
Si su vehículo tiene airbag frontal, nos ayudará a prevenir daños en la muñeca o en las manos en caso de impacto. Por último deberemos permitir que nuestros codos descansen cómodamente.
Ahora para una comprobación final de su posición. Después de que crea que tiene todo establecido correctamente, necesitará comprobar si tiene entre 90 y 130 grados de flexión en los codos, con las manos en la posición de las 9 y las 3 en punto. A continuación, asegúrese de que todos los indicadores y las luces de trazo en el panel de instrumentos son claramente visibles sin el volante que impide su vista. Los tres espejos se deben establecer para proporcionarle visibilidad adecuada en todas las direcciones. Con este último repaso, habrás obtenido una posición correcta.
Para la mayoría de la gente, esta posición puede encontrarla algo más lejos de lo habitual, sobre todo la distancia al volante y los pedales. Puede que estuvieras sosteniendo el volante en la posición de las 10 y 2 y el respaldo lo tuvieras demasiado reclinado. Al principio pueda que esta posición te sea incómoda, es normal, necesitarás un periodo de adaptación.
Con un poco de práctica y poniendo un mínimo de cuidado en el ajuste de los asientos (conduciendo cualquier coche) podrás desarrollar una mejor posición de conducción, y no sólo un mejor control del coche, sino que también la conducción será mucho más segura. Además esta rutina no te llevará más de un minuto emplearla en cualquier coche que utilices.
Puedes utilizar una plantilla con algunos consejos para comprobar tu postura y asegurarte una posición correcta. El PDF original lo puedes descargar aquí.
¡Nos vemos en el asfalto!