Hay trenes que sólo pasan una vez en la vida o eso dicen. Y en ocasiones puede que pasen todos los años pero hay que tener el valor o la posibilidad de poder subirse a ellos. Esto mismo nos pasó hace unos meses cuando se nos ocurrió el porque no asistir a un GP de Fórmula 1 en directo, ¿pero a cual de todos?.
Esta temporada 2023 cuenta con hasta 23 grandes premios repartidos por todo el mundo y como era normal los 9 GP que se disputan en Europa eran nuestras principales apuestas y en especial el gran premio de España en Montmeló. Como ya sabéis no nos dedicamos profesionalmente a esto de la información del mundo del simracing, todos tenemos nuestros respectivos trabajos y por tanto habría que pedir unos días de vacaciones y eso restringía un poco las fechas posibles. Otro factor muy importante para la elección de la carrera es el precio y disponibilidad de entradas.
Como ya os podréis imaginar, asistir en directo a una carrera de Fórmula 1 no es algo precisamente económico, pero tampoco tiene porque ser algo imposible para un trabajador medio. Aunque hay citas que son una completa locura y un sin sentido, y no, no nos referimos al precio de las entradas del GP de Mónaco. Una entrada por ejemplo para asistir al GP de Miami supera fácilmente los 2000€ para los tres días, las más “baratas” por decir algo por no hablar de lo rápido que se agotan las entradas en algunas carreras.
Así que mirando precios de entradas en la web oficial y comparando, vimos que el GP Bahrein ofrecía buenos precios y ubicación en la pista al margen de que parecía que había una alta disponibilidad hasta casi las dos semanas previas, y es que empezamos a mirar entradas y decidir a que GP asistir a mediados de Noviembre del año pasado. Entradas para los tres días en la grada de la curva 1 por 295€. No estaba nada mal de precio la verdad.
Bueno, pues teníamos un primer candidato para asistir. Bahrein, el primer GP de la temporada entre el 3-5 de Marzo. Unas fechas que nos permitían disponer de días de vacaciones en nuestros trabajos sin molestar mucho a los jefes, así que a mirar precios de vuelos para ver si era económicamente factible.
Lo primero que vimos es que no hay vuelos directos desde España hasta Bahrein, forzosamente había que hacer una escala, lo cual por una parte es bueno ya que generalmente abarata el precio de los pasajes pero por otro lado añade horas de viaje que no valen para nada. Esperas y más esperas en aeropuertos genéricamente insulsos.
A través de la web skyscanner, que ya seguro que conoceréis, encontramos vuelos Madrid-Bahrein con una escala más o menos corta en la ciudad de Jeddah en Arabia Saudí a través de la compañía aérea de este mismo país, Saudia. Saldríamos el martes 28 de febrero para aterrizar en Manama en la madrugada del miércoles 1 de Marzo; la vuelta sería el martes 7 de marzo de madrugada para aterrizar en Madrid a media tarde del mismo día por un total de 367€.
Ya tenemos una idea aproximada de que entradas más vuelos serían unos 750€ y creerme que eso es menos de lo que cuesta una entrada de 3 días para ver un GP en Europa.
Con la idea cada vez más clara de que Bahrein era la carrera elegida empezamos a mirar hoteles y nuestra sorpresa fue ver el nivel e inmensa variedad de hoteles que tiene su capital, Manama. Las grandes cadenas hoteleras más famosas están presentes en esta pequeña isla del golfo pérsico pero si se busca un poco más se encuentran opciones de hoteles de 4-3 estrellas con desayuno incluido por precios realmente buenos y es que como comentamos la oferta de hoteles es inmensa. Un 4 estrellas con desayuno incluido por 6 noches, 270€ por persona en una habitación doble. Ese precio es bastante tentador y las opiniones en Booking del hotel eran bastante decentes así que le ponemos el ojo.
Con un presupuesto de gastos fijos en entradas, desplazamiento y hospedaje más o menos claros nos damos un par de días para consultarlo con la almohada. Es algo que no se debe hacer así a la ligera, no deja de ser una cantidad de dinero importante a no ser que se tenga una economía desahogada. Pero que narices… como decía al principio hay trenes a los que hay que atreverse a subirse y este es uno de ellos. Total ¿cuantos equipos más vamos a ver a Alonso estrenarse en F1?¿cuando nos van a dejar sin poder viajar con cualquier excusa? pues eso.
LISTO. Del 3 al 5 de Marzo íbamos a asistir al GP de Bahrein, el primero de la temporada con la expectación y emoción que conlleva la vuelta de la F1 a nuestras vidas. Y si lo piensas bien, si hay una carrera llena de incógnitas esa es la del estreno de la temporada, aunque este año 2023 la normativa de los coches es la misma que la del año pasado, los equipos tienen toda la experiencia del año anterior para desarrollar los coches del 2023. ¿Que equipo habrá evolucionado más su coche? ¿Mercedes conseguiría estar a la par de Red Bull como al final de la temporada 2022? ¿Ferrari habrá aprendido de sus errores y tendrían mejor fiabilidad? ¿La Mision de Aston Martin iba a ser lo mismo que El Plan de Alpine?
Todo eran preguntas sin respuesta que hasta la clasificación del sábado no se podrían resolver y nosotros íbamos a estar en esa grada de la curva 1 donde se producen los adelantamientos.
Nunca habíamos experimentado tantas ganas de que se acercará el inicio de la temporada de F1 como este año. Y los test de pretemporada no hacían más que incrementar nuestras ganas de que pasaran los días volando. Según los test, Red Bull seguía siendo el equipo a batir, Mercedes y Ferrari en un segundo escalón… ¿y que era ese coche verde que se colaba en la parte alta de la tabla cada vez que salía a pista a marcar un tiempo rápido? ¿Era el Aston de Alonso? ¿Resultaría que El Plan era La Mision? Bueno, eran sólo los test de pretemporada y la única verdad era que Red Bull volaba sobre la pista.
Se acerca el día, maleta preparada con ropa esencialmente de verano y es que las temperaturas en Bahrein la primera semana de Marzo rozarían los 30ºC a medio día y no bajarían de los 20ºC a la noche.
Quien les escribe debe desplazarse a Madrid desde Valencia y que mejor que la red de AVE para hacerlo, 18€ ida y vuelta en la marca low cost de AVE. Una auténtica ganga si tenemos en cuenta los días que corren. Así que maleta preparada, billetes en modo electrónico y en papel, cargadores en la mochila y pasaporte en regla. Todo listo aunque pasé por alto un pequeño detalle de previsión de tiempo, cruzar Valencia en autobús en plena hora punta de la mañana me iba a llevar más tiempo de lo esperado. El tren salía de la estación Joaquín Sorolla a las 9:15h y servidor entraba por las puertas de la estación a las 8:55h como el meme de Lawrence Stroll en la presentación del Aston Martin, sabiendo que el trabajo estaba hecho.
Con puntualidad salía el tren y en apenas dos horas después estaba bajando en la estación de Chamartín donde me encontraría con Gonzalo para tomar el cercanías que nos dejaba en Barajas. El tren nos dejó en la T4 y nuestro vuelo salía desde la T1. Para el que no lo sepa, el aeropuerto cuenta con un servicio de autobuses gratuito que conecta todas las terminales. Ya en la T1 buscamos el mostrador de facturación de la compañía Saudia para facturar nuestras maletas ya que nos entraba en el precio base de los billetes y teniendo en cuenta los diferentes controles de seguridad que tendríamos que pasar iba a ser más cómodo no ir con maletas para arriba y para abajo. Y como no podía ser de otra manera el tiempo de espera en los mostradores de facturación se hizo eterno, y no precisamente porque hubiera mucha gente para facturar si no porque siempre hay alguien que no se entera muy bien de la película y ya si viajan con niños pequeños y carritos eso se puede convertir en una odisea. Pero para odisea la que vivimos nosotros con nuestras maletas y es que facturarlas fue el mayor error que cometimos en todo el viaje, pero no adelantemos acontecimientos.
Después de que la chica de facturación comprobara que teníamos los visados en regla para entrar en Bahrein y que no nos iban a mandar por donde habíamos venido, vamos para el control de seguridad y pasaportes y puerta de embarque. Y ahí estaba el Boeing 787-9 que nos iba a llevar a Jeddah tras casi 6h de vuelo que iban a transcurrir viendo películas y disfrutando de las vistas de la costa de Túnez y Argelia antes de que se pusiera el Sol momentos antes de sobrevolar Egipto aunque pudimos contemplar la gran iluminación de lo que suponemos que eran los museos y templos de la ciudad de los Faraones, Luxor.
Sobre las 21:00h local tomábamos tierra en Jeddah, ciudad puente para una gran cantidad de musulmanes que quieran visitar La Meca ya que se encuentra a escasos kilómetros. Y como no, desde hace un par de años alberga el GP de Arabia Saudí con un circuito de vértigo entre muros que, por cierto está muy cerca del aeropuerto. Seguimos las indicaciones de “Transfers” para llegar hasta nuestro siguiente vuelo y nos encontramos con la sorpresa de que debemos pasar un nuevo control de seguridad.
Estábamos avisados de que en Arabia Saudí son bastante estrictos con su seguridad y de quien entra en su país, pero bueno técnicamente no entrabamos en el país sino que íbamos de paso. Fue más una molestia porque nuestra escala era de 1:30h y no nos sobraba mucho tiempo más que por que nos pusieran muchos problemas, es más, nos colaron en una cinta rápida ya que íbamos justos de tiempo todos los que volábamos para Bahrein.
Segundo avión del día, Airbus A-320 Neo sería el que nos llevaría hasta nuestro destino final tras cruzar toda la península arábiga tras menos de 2h de vuelo. No eran todavía las 3:00 am hora local cuando por fin tocábamos suelo bahreiní y ya nada más entrar en la terminal eres consciente del nivel de vida que tienen muchos por estos lares, pero de los choques culturales y curiosidades hablaremos más adelante.
Control de pasaportes y visados, que por cierto son gratuitos para todos aquellos que presenten entradas para el GP. Sello y para adentro.
Bienvenidos a Bahrein, que disfruten de su estancia.
Y así es como debería terminar esta primera parte de nuestra aventura arábiga. Pero ¿os acordáis de lo que comenté en el momento de facturar las maletas, verdad? Con más sueño que fuerzas después de unas 15h totales de viaje y viendo como salían maletas de la cinta una tras otra sin que aparezcan las nuestras, se detiene y un chico nos hace indicaciones de que fuéramos a la zona de reclamación de equipajes porque ya estaban todas descargadas y las nuestras no habían aparecido.
¿Nos habían perdido las maletas? No creo, ¿no?
Sí.