Llega el momento de hablar de la generación número 11 de Intel. La serie de transición de la compañía norteamericana en su lucha por alcanzar el rendimiento de AMD y que significa el último intento de aprovechar su litografía de 14nm. La opinión general de los analistas del sector ha sido de decepción al no ser capaz de igualar a los procesadores AMD ni superar con claridad a su anterior generación. De la serie 10 ya os hablamos aquí brevemente cuando pudimos probar los Intel de gama media y alta.
Quizá lo más importante a destacar de estos modelos, los de la décima y undécima generación, es que podemos reusar las placas para estos últimos ya que mantienen el socket LGA 1200 usado hasta ahora, lo que permite al menos poder hacer una remodelación en caso de necesitarla o encontrar piezas de recambio en un futuro.
Especificaciones de la CPU
- Cantidad de núcleos 6
- Cantidad de subprocesos 12
- Frecuencia básica del procesador 2,60 GHz
- Frecuencia turbo máxima 4,40 GHz
- Caché 12 MB Intel® Smart Cache
- Velocidad del bus 8 GT/s
- Frecuencia de la Tecnología Intel® Turbo Boost 2.0 4.40 GHz
- TDP 65 W
Actualmente uso un equipo con un procesador 8600K de principios del 2018, que cuenta con unas características bastante similares en cuanto a capacidades, por lo que si lo miramos en perspectiva, se trata de un micro bastante similar, salvo que la undécima generación tiene mejoras en eficiencia energética, un aumento de la cache y la disponibilidad de Hyper-Threading.
Este ultimo se nota especialmente en la mejora de las aplicaciones de multinúcleo que disponen de 12 hilos de procesamiento lógico para acelerar diferentes procesos y que hacen que en los benchmark genéricos se destaque por encima de un procesador similar con 3 años a sus espaldas.
En estas dos imágenes se puede comprobar a primera vista que mejoras ofrece sobre una CPU de 6 cores antigua. El Hyper-Threading hace que casi doble en la puntuación de CPU mientras que funciona a menor frecuencia (el 8600K esta con un ligero OC) mientras que en la prueba de gráficos con la CPU su rendimiento es ligeramente menor.
Lo malo del asunto de esta rama de i5 es que no permiten el OC y que el máximo que alcanza son 4,40GHz y no en todos los núcleos. Se pueden forzar en un core, pero hemos dejado que la misma CPU se gestione para estos pequeños benchmark de referencia en los que alcanza 4,2GHz.
Evidentemente los puntos buenos de esta CPU son aquellos referidos a la eficiencia energética, remarcada por la eliminación del chip gráfico y la perdida de tareas como la codificación de video en tiempo real que hacen que el peso recaiga sobre la gráfica dedicada y su consumo y refrigeración sean muy accesibles. Como ejemplo de ello, viene con el disipador de serie, que no se incluye en otros modelos donde una refrigeración más exhaustiva es necesaria.
Así que no tenemos una CPU entre manos que nos vaya a dejar boquiabiertos, pero sí que cuenta con la misma potencia que otras que tenemos en el mercado pero gastando menos, y tal como está la electricidad en nuestro país, todos los W de ahorro cuentan.
Por nuestra parte hemos realizado unos test de rendimiento con VR (HP Reverb G2) en Assetto Corsa Competizione en varias pruebas simuladas para ver que tal se comporta contra el 8600K de hace tres años y medio. Las pruebas con el 11400F son las que marcan como fecha el día 1 de agosto.
Monza
El circuito italiano es un clásico en las competiciones de motor y posee suficientes elementos externos como para poner a nuestros componentes a tono (en realidad el motor Unreal de ACC) y ver de que son capaces.
En la siguiente tabla se puede observar que el 11400F (la gráfica y datos del 1 de agosto) es capaz de generar mas FPS ya que su tiempo de generación es considerablemente menor. Aún así sigue por encima de los 11ms, que es donde conseguiríamos una fluidez de 90 FPS y dejaríamos de ver dropped frames.
En la gráfica siguiente se puede ver que el azul esta consistentemente debajo del amarillo, por lo que la mejora del 11400F respecto al 8600K existe, pero no se ve reflejada en nuestros ojos como demuestran las zonas verdes y rojas, que son prácticamente iguales.
Kyalami
Una de las joyas de Assetto Corsa Competizione es este remozado circuito sudafricano que fue sede de la fórmula 1 ya hace demasiados años. Ahora de la mano de Porsche ha vuelto a tener protagonismo. En estas tablas y gráficas vemos lo que ya anticipábamos en las anteriores, que el 11400F está por encima y es ligeramente más potente.
Menos diferencia que en Monza en el tiempo de generación, lo que hace que ambas CPU estén muy igualadas, aunque los números dan un claro ganador.
Bathurst
Mount Panorama es un circuito australiano realmente increíble. En el se desarrolla una de las carreras más apasionantes del año como la Bathurst 1000 y cuenta con autenticas leyendas del motor de Oceanía entre sus ganadores. Es una experiencia espectacular para cualquiera que tenga la oportunidad de presenciarlo o recorrerlo.
Si las anteriores pruebas estaban parejas, aquí se cierra aún más la distancia y ambas CPU casi se igualan.
La gráfica prácticamente aparece solapada, al igual que las zonas de FPS sostenidos liberados y los que se pierden, por lo que podríamos decir que están a la par.
Conclusiones
Hay que aclarar que aunque los tiempos de toma de datos se han hecho sobre los mismos circuitos en las mismas condiciones, no siempre han sido idénticas en cuanto a coches representados alrededor, lo que puede haber influido ligeramente en las tablas y los gráficos. Viendo la consistencia general de las conclusiones parece que es descartable que tenga importancia.
En resumen, y aunque este modelo 11400F se sitúa por debajo en la calificación de i5 de otros como la serie 11600, es suficiente para tener una experiencia de juego satisfactoria en monitores siempre que se acompañe de una tarjeta gráfica moderna a su altura. En VR posiblemente flaquee ya que está en niveles de rendimiento de CPUs de hace tres años, aunque su precio actualmente supera los 200 euros, lo que no tiene sentido y hace que no sea una opción a considerar. Hay que recordar que su precio de partida estaba en 170 euros, y ahora debería estar por debajo, pero el mercado y el stock tienen otros planes.