Análisis de Need for Speed Unbound

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La saga Need for Speed es legendaria, tanto que algunos de los que nos leéis la lleváis conociendo desde que jugabais en vuestro primer ordenador. Siendo tan mítica, ¿habrán aprendido de sus errores?

Desde The Need for Speed (1994) han predominado esas carreras callejeras, persecuciones locas y esa sensación de velocidad extrema, pero, ¿son 30 años los necesarios para innovar la fórmula? ¿O deberían ser menos aún? Es cierto que, salvo algunos títulos y algún cambio de desarrolladores, pudimos percibir esa diferencia. Principalmente, pudo notarse en ese cambio de motor a Frostbite 3, pero en mi opinión, un cambio de motor no es suficiente.

Llevo un tiempo probando Need for Speed Unbound, porque no voy a mentir, a primera vista me llamó la atención. Siempre he sido muy crítico con esta saga, ya que siempre había algo que me rayaba y que no podía disfrutar al 100%, ya fuera por ese manejo tan tosco, por recortes de contenido inexplicables que sí contenían sagas anteriores, pero no las más modernas, o pequeñas nimiedades que para mí eran un mundo aparte. Esto no quiere decir que odie la saga, Need for Speed: Payback lo disfruté como aquel Most Wanted (2005) en mi PlayStation 2. Horas de disfrute y además con esa comunidad online que posteriormente actualizaron para hacerlo más ameno. A priori, Need for Speed Unbound te pone esa buena cara, hace que pienses que puede ser algo innovador, una fórmula diferente que puede hacer la saga grande de nuevo. Pero, de nuevo, la filosofía de vida «no es oro todo lo que reluce»; y parece que Unbound lo cumple al pie de la letra.

Need for Speed Unbound tiene un estilo característico: nada más abrirlo tiene esa banda sonora que encaja perfectamente con el propio estilo. Algo «underground moderno», aunque indagaré en esto más adelante. Al empezar el propio título vemos, con la canción de inicio (Shittin’ Me), que el protagonista principal es A$AP Rocky, rapero estadounidense. O eso es lo que parecía, al fin y al cabo no deja de ser un tipo de “reclamo” o marketing, quizá, porque apenas sale en el juego. Con este detalle podemos observar que el público principal al que se dirige este título es la gente joven o adolescente.

A continuación, vamos a hacer un pequeño análisis punto por punto de Need for Speed Unbound:

Historia


Aunque este aspecto nunca fue el predominante en los títulos de la saga, en este tampoco lo es. Es un guion básico, sin un gran fundamento, porque había que acompañar el progreso con algún tipo de historia. Principalmente, se basa en una ciudad que se enfrenta a una agitación política causada por carreras clandestinas e ilegales, siendo el protagonista un mero trabajador de un taller para un viejo conocido, el cual se verá comprometido por una traición que produjo que el propietario del taller empezase de cero.

Como decía, no es su punto fuerte. Gran parte de la explicación de la agitación política se escucha en las emisoras de radio, haciendo que puedas perderte gran parte del diálogo si vas conduciendo y entras en un evento.

La personalización del jugador no es muy profunda, pero no se queda corta. Realmente apenas verás al personaje, ya que irás conduciendo la mayoría del tiempo. Las prendas de ropa son licencias reales, como por ejemplo Vans, Puma, Fila, etc. Algunas de ellas debes desbloquearlas mientas juegas.

Una vez creado el personaje, te darán a elegir tres vehículos: Dodge Charger (69), Lamborghini Countach (88) y un Nissan Silvia (96).

Modos de juego


En cuanto a modos de juego, obviando lo principal, eventos de carreras callejeras, podemos encontrar lo que teníamos en Need for Speed Heat o Need for Speed Payback, como radares, zonas de derrape, zonas de velocidad, etc.

Aparte de todo esto, los eventos con los que conseguimos dinero para mejorar nuestro vehículo o conseguir nuevos, se limitan a carreras callejeras, carreras de derrapes, eventos que consisten en destruir objetos para ganar.

Los eventos principales para ganar dinero acaban siendo algo repetitivos. Se basa en realizar carreras para poder mejorar el coche, consiguiendo un nuevo nivel de vehículo para poder competir en estos eventos de mayor nivel.
En este título también encontramos la mecánica del día y la noche, aunque de una forma diferente de la que lo planteaba el título anterior. En este caso no podemos elegir entre día o noche, al menos de forma directa. Lo que haremos es competir y completar eventos hasta que estemos satisfechos con el dinero conseguido, volver al garaje para asegurar ese dinero y automáticamente habrá un timelapse a la noche. Causando que el progreso esté compuesto por semanas. En el caso de la noche, la policía será más responsiva o más fácil de iniciar una persecución.

Persecuciones y niveles de calor

En Need for Speed Unbound el nivel de calor actúa de forma directa a cómo la propia policía nos dará caza. Heat 1 o «nivel de calor 1» significa que la policía únicamente responderá a provocaciones directas. A medida que destruyamos vehículos policiales o continúe la persecución, avanzaremos de nivel. El límite es el nivel 5, siendo este el más complicado, ya que en el momento que te vean, te intentarán arrestar sin descanso.

Gráficos


Llegamos al apartado visual y no es nada desagradable a la vista, tiene una paleta de colores que pienso que está muy bien ajustado a su estilo y aunque no utiliza la última tecnología en gráficos como ray-tracing, no deja de verse bien en cuanto a reflejos. Sí que cuenta con DLSS, además de la tecnología de AMD FSR. En cuanto a optimización, con mi RTX 2060 y mi i5 12400f no va nada mal. Si es evidente que en algún punto puedes notar cierto popping, algo que también ocurría en títulos anteriores, aunque en este no es tan notorio.

Estilo

Sin duda tiene un estilo diferente al resto, a lo que estábamos acostumbrados. Para mí ha sido un acierto esos efectos de derrape, al hacer una acrobacia o cuando tenemos un golpe. Además, el dibujado de los personajes cel shading me ha convencido sin duda.
Existe un grupo casi mayoritario al que estos efectos y este estilo no les convence, pues me temo que no se puede desactivar. Al menos no con una opción que nos proporciona el propio juego, solo es posible con modificaciones externas.

A estos efectos le han dado una pequeña «utilidad», puesto que cada vez que vas avanzando en el propio juego, puedes desbloquear algunos nuevos.

Sonido


Como decía al principio, la elección de la banda sonora para mí es un 10. Esa elección de trap y rap que encaja perfectamente con el estilo tan característico de este título no pasa desapercibida. En las propias emisoras de radio podemos encontrar cantantes como Rosalía, Villano Antillano, A$AP Rocky y demás.
Al cabo de unas horas jugando encontramos la escasez de estos temas, no descarto una expansión futura en algún tipo de parche de nuevas canciones o emisoras, pero hasta el momento es lo que tenemos.

El doblaje en español, por otra parte, no es destacable, y si lo es, no es para bien. Mi recomendación es que lo juegues con las voces en inglés.

Sonido de los coches

Sin duda, también es algo para destacar, tiene un gran sonido de motores. Además del detalle que podemos percibir al mejorar el vehículo, va cambiando el tono del sonido.

De hecho, podemos ajustar el sonido del coche, si queremos que sea más crudo o más suave, además del timbre y del silbido del turbo.

Jugabilidad


A partir de aquí debo de agradecer a Criterion Games por ese cambio de manejo y de jugabilidad. No me terminó de enganchar absolutamente nada el manejo que tenían los títulos anteriores, siempre lo sentí tosco y no pude acostumbrarme al manejo para disfrutar por completo esta saga.

En cambio, jugando con un DualShock4 he llegado a sentir la dirección suave, más directa y sin duda más manejable. Eso sí, no esperes una configuración de zonas muertas de gatillos o una reprogramación de botones. También, si pretendes utilizar un volante, aunque no está pensado para nada porque la conducción no deja de ser arcade, no tendrás nada de configuración ni calibración de ningún tipo. Esto no necesariamente es malo, pues no deja de estar supuesto jugar con un mando. (Si intentas jugar con un volante podrás aunque esté pre-configurado por el propio juego)

También puedes ajustar en cada vehículo el tipo de conducción que prefieres, ya sea derrape, campo a través o más agarre.

Contenido


«Más vale calidad que cantidad», es el ejemplo que se debería seguir en la mayoría de los casos. Contamos con un total de 143 vehículos hasta el momento. No está nada mal el número de estos sabiendo la posibilidad de accesorios de personalización con los que cuenta, pero también es cierto que no dejan de ser los mismos vehículos con los que contábamos en entregas anteriores (es entendible por el simple hecho de las licencias) salvo un par de nuevos añadidos.

En cuanto a personalización, en parte volvemos al tema de las licencias, sobre todo con las llantas. Seguimos teniendo las de otras entregas más algunos nuevos añadidos que van de la mano con la personalización estrafalaria.

Ese tipo de personalización no me ha terminado de convencer. No sé si soy más clásico y no entiendo ese tipo de accesorios enormes, cuadrados y afilados, pero sin duda me quedo con la personalización de Need for Speed Heat o Payback. Aunque la antigua personalización también podemos encontrarla junto a la nueva, no es el mismo grado de cantidad que anteriormente.

Por otra parte, en cuanto a contenido secundario tenemos coleccionables, como grafitis, que nos desbloquean nuevos efectos cartoon y algunos saltos acrobáticos para destruir carteles y de distancia.

En el contenido no es donde reside el problema principalmente, como decía antes, más vale calidad que cantidad, pero no es la calidad lo que falla.

Conclusión


En conclusión, aunque no es necesario que lo diga si lees el resto del texto, no ha sido un gran lanzamiento. Si eres muy fan de la saga y juegas a la mayoría o casi todos los títulos, puede que lo disfrutes, pero si eres un jugador casual que busca un arcade a la altura de tus exigencias, quizás no es la elección más acertada.

Es un título que empieza en un punto álgido, que da la sensación de que aporta algo diferencial a lo que estamos acostumbrados a ver en esta saga. Pero me temo que no, sigue siendo la misma fórmula usada y reusada que no nos aporta nada más salvo un estilo diferente a lo ya visto. La historia es casi inexistente, no es algo que enganche desde el primer minuto y lo peor es que pasadas unas horas se vuelve repetitivo.

Lo único que parece un acierto es el tema de las físicas de los vehículos. A partir de aquí, aunque no espero nada en concreto, me da la sensación que podrían ir por el buen camino, porque ya es hora de darle un lavado de cara pensando en la próxima entrega.

Dónde comprar

Aunque yo lo he jugado en PC en versión de Steam (en PC tienes varias versiones como Steam, Origin o Epic Games) y este análisis está realizado en el mismo, puedes comprar Need for Speed Unbound para consolas también.

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