El pasado fin de semana se celebraba en Bilbao la sexta edición de la Fun&Serious. Para los que no lo conozcáis es una especie de Gamergy en versión reducida, o lo que es lo mismo, un evento en el cual se celebran una serie de campeonatos y finales de distintos juegos así como exposiciones, ponencias o pruebas de distintos videojuegos. Sin duda un marco incomparable para las marcas y empresas relacionadas con el gaming para darse a conocer y encontrar una enorme cantidad de clientes potenciales de su producto.
Esta es la segunda edición a la que voy, la primera fue el año pasado y si la memoria no me falla lo único relacionado con el simracing que vi fue un pequeño stand del equipo Ibérica Racing Team en el que tenían montado un cockpit de Custom Cockpits, un volante Accuforce, unos pedales Heusinkveld, tres monitores y el simulador iRacing en Watkins Glen para que la gente fuese probando durante un par de vueltas. Puedo aseguraos que si no era el stand que más cola tenía poco faltaba, estoy seguro que a más de uno de sorprendió la enorme expectación generada por ese pequeño stand de aparentemente un e-sport minoritario.
Pues bien, este año la película ha cambiado y mucho y las empresas fuertes de este sector han decidido colmar el evento con una infinidad de puestos de conducción, hasta el punto de que, sin miedo a exagerar podría decir que como mínimo el 30% de la F&S estaba dedicada a los juegos de coches, algo altamente improbable si lo hubiésemos dicho tan solo un año atrás.
Por recapitular y hablando un poco de memoria puedo recordar 6 Playseat con sus respectivos volantes Thrustmaster para probar el Dirt4 en un par de tramos, otros 6 stand exactamente iguales para probar el F1 2017 y otros 2 para hacer lo propio con el WRC 2017. Todo esto sin contar el gigantesco camión que decidió llevar al evento Cloud Sport con hasta 12 puestos de conducción para probar el Forza 7 bajo la plataforma Xbox.
Inevitablemente los que estamos adentrados en este mundillo vemos un montón de cosas que cambiaríamos en estos eventos en lo que se refiere a la posición o inmersión de todos estos puestos como puede ser la inmensa lejanía desde el volante a la pantalla, al ausencia total de auriculares/cascos que permitan adentrarse un poco más en la experiencia o que para probar un mismo juego halla volantes tan dispares como en unos de ellos un T150 y en otros un T-GT, volantes que como es más que evidente no transmiten las mismas sensaciones.
Igualmente todo esto es una gran caña de pescar y entre las más de 30.000 personas que se estima que pasaron por el evento estoy convencido que algunos de ellos entraron sin la más mínima intención de comprar jamás un volante y salieron con ganas de irse al game de turno más cercano a por uno parecido al que habían probado, y algunos de esos acabaran siendo simracers, no tengáis ninguna duda.
Obviamente la sensación es menos purista que la que el pasado año ofrecían los chicos de IRT pero en cierto modo tampoco creo que estas marcas buscasen algo asi, lo que si podemos decir es que si en 2016 tuvimos un puesto de conducción en la F&S en este 2017 hemos tenido 26. De 1 a 26, ¿Os dais cuenta del increíble salto que esto significa?
No sé que camino tomará el simracing en los próximos años, si esto será una moda pasajera o si es el principio de algo tan grande como han construido otros e-sports como LOL o CS, pero el que diga que esto no iba a crecer…que no os tenga que dar nunca los números de la lotería.